Después de la brutal muerte de George Floyd en EE.UU. en mayo, varios movimientos a favor de los derechos humanos surgieron en todo el mundo, especialmente, en los Estados Unidos, el Reino Unido y otras partes del mundo occidental.
El lema Black Lives Matter o BLM se hizo inmensamente popular durante varios meses, con varias organizaciones sociales y políticas mostrando su solidaridad con el movimiento, que simboliza la igualdad de derechos y privilegios, especialmente para las personas de raza negra.
La comunidad deportiva no se quedó atrás, ya que las principales ligas deportivas y partidos profesionales en RU y EE.UU. mostraron solidaridad con los movimientos, pues se vio a jugadores y oficiales hincando la rodilla antes del inicio de cada partido. Para los protagonistas, cuyas voces parecían más fuertes, el movimiento y todo lo asociado con él fue una idea bienvenida.
Varias encuestas sugieren que el movimiento BLM puede ser el más grande de la historia de EE.UU., ya que entre 15-26 millones de personas afirman haber participado en él.
En octubre la Comisión Electoral anunció que había recibido la solicitud de un grupo que buscaba registrarse como partido político bajo el nombre de Black Lives Matter.
El anuncio despertó cierta la curiosidad del público, ya que muchos se preguntaban si BLM se convertiría finalmente en un partido político en RU.
Sin embargo, BLM salió a desmentir cualquier participación o afiliación con el nuevo partido político. “BLM está orgulloso de ser una organización política, pero no tiene planes de establecer un partido político”, afirmó Lemara Francis, portavoz de BLM.
El apoyo masivo a Black Live Matter en todo el mundo, ha visto a diversos individuos y grupos actuar bajo su nombre, pero “no todos comparten los objetivos del movimiento general de BLM”, afirmó Lemara.
En septiembre, el grupo se registró como un organismo oficial con un nuevo nombre, Black Liberation Movement, para cumplir con la condición de recibir 1,2 millones de libras esterlinas donadas a través de un llamamiento de GoFundMe. En parte, responsables del cambio de nombre fueron las diferentes organizaciones que ya se han registrado bajo las diversas permutaciones del lema “Black Lives Matter”.
Creado en 2016, el BLM UK ha organizado diversas actividades en su campaña contra el racismo y la injusticia. Y siguiendo con la declaración de Lemara, la organización se mantendrá fiel a su comunidad, sin intenciones de convertirse en un partido político.
Aunque BLM no planea crear ningún partido político por el momento, es cierto que tal vez muchas voces están pidiendo la formación de un partido político independiente bajo ese nombre.
In junio, el fundador de Black Entertainment Television, Robert Johnson dijo a la CNBC: “Estoy convencido desde hace mucho tiempo de que 40 millones de afroamericanos que tienden a votar en bloque a uno de los dos partidos, limitan su influencia para conseguir la acción de ambos partidos”.
También hay muchas otras personas que creen que no ser racista no es suficiente: todo el mundo debe ser anti-racista activamente.
El movimiento BLM, en general, parece haber registrado muchos logros importantes desde la muerte de Floyd.
Entre ellos se incluyen el mero gesto de evitar los estereotipos, condenar las políticas y programas represivos pasados y actuales, y exigir justicia para las víctimas antiguas y recientes de la injusticia, especialmente el racismo.
En septiembre, un partido político registrado en RU, Taking The Initiative Party (TTIP), inspirado por el movimiento BLM, sometió a debate su intención de diputar en las próximas elecciones generales. Según la constitución del partido: “no habrá discriminación por motivo de sexo, raza, color, credo, edad, discapacidad u orientación sexual”.
Sasha Johnson, una de las voces líderes del partido, afirmó: “Queremos nuestro propio partido político, uno que refleje la nación multicultural en la que nos hemos convertido. Estamos cansados de ser defraudados por los laboristas, los conservadores, los demócratas liberales y todos ellos”, afirma la señora Johnson, de 26 años de edad.
Si bien el BLM puede haber rechazado la política partidaria, sus repercusiones en el espacio político del Reino Unido y de Estados Unidos en los últimos tiempos no deben ser subestimadas.
Un buen ejemplo es el papel desempeñado por el grupo en las últimas elecciones presidenciales de EE.UU. Las protestas en verano, que inspiraron a cientos de miles de personas a registrarse para votar, vieron un aumento en los votantes registrados de raza negra, así como en otros votantes de color, incluyendo a los votantes latinos.
Todos estos esfuerzos se complementaron también con otros grupos simpatizantes, como Fair Fight, que trabajó con otros organizadores para registrar alrededor de un millón de nuevos votantes desde 2016 en Georgia. Este esfuerzo único, en el que aproximadamente dos tercios de los votantes adicionales eran votantes de color, fue decisivo para convertir a Georgia un estado en disputa.
El logro no se limitó a conseguir que la gente se registrara. También inspiró a muchas mujeres de raza negra a competir por cargos políticos importantes, con 130 mujeres de raza negra como candidatas al congreso, junto con Kamala Harris, que postuló con éxito para vicepresidenta.
Por supuesto, no todos los votantes de raza negra registrados favorecieron a los demócratas, ya que hay algunos que se inclinaron por los republicanos. Por ejemplo, de las 132 mujeres de raza negra que postularon para el Congreso, 98 eran demócratas, mientras que las restantes 32 eran republicanas.
En total, el movimiento BLM fortaleció la participación electoral de ambos bandos, ya que cada candidato presidencial registró votos sin precedentes, con más de 70 millones de cada bando.
En el Reino Unido, el BLM ha inspirado a una joven generación de nuevos activistas desde las protestas, que se dijo que fueron “las mayores concentraciones contra el racismo del país”.
Entre ellos se encuentra Natasha, de 21 años, que coorganizó una de las primeras protestas del BLM UK en mayo y más tarde, ayudó a fundar una campaña liderada por jóvenes, llamada All Black Lives.
El grupo, junto con otros manifestantes, celebró concentraciones del BLM cada domingo durante diez semanas en varias ciudades importantes del RU. Como se muestra en su página de redes sociales, All Black Lives es un grupo “que lucha por la igual racial y la justicia para todas las personas de raza negra en el Reino Unido”.
Benitha Iradunkunda, de 25 años, es otra joven activista británica al frente de las concentraciones de Black Lives Matter en Edimburgo. Tanto ella como otros están creando una organización benéfica para prestar apoyo y orientación a la comunidad negra en educación, salud, política y otros temas. Conocido como African Caribbean Society of Scotland, el grupo ha organizado en línea el Mes de la Historia Negra y ha realizado una serie de entrevistas.
La lista incluye a Tré Ventour, de 24 años, que ha participado en una mesa redonda de Black Lives Matter y actualmente, también defiende los derechos de la comunidad LGBT de raza negra. También es digna de mención Shekinah Swamba, de 19 años, que organizó las protestas de Black Lives Matter en Waitrose. Ahora ha fundado la Local Equality Comission, un grupo que trabaja para combatir la desigualdad racial y económica en las áreas rurales.
*Olusegun Akinfenwa es corresponsal político de ImmiNews.
(Traducción de Lidia Pintos Medina) – Fotos: Pixabay
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