Si bien es cierto que en El Salvador los casos de feminicidios disminuyeron en el último año, eso no se traduce en que el país sea más seguro para las mujeres pues en él ocurrieron 916 casos más de violencia sexual.
Luis Beatón
Se trata de un problema ya endémico en un país, donde la mujer es discriminada y abusada de muchas formas.
Las estadísticas reportadas por la Fiscalía General de la República (FGR) en sus últimas dos memorias de labores revelaron que existió un aumento a escala nacional de casos de violencia contra las mujeres, entre junio de 2022 y mayo de 2023.
Mariana Moisa, antropóloga feminista de la colectiva “Las Incómodas”, plantea que durante el gobierno de Nayib Bukele existe una constante negación de la violencia contra las féminas
“Por ejemplo, hay mucha resistencia a nombrar el feminicidio, hay resistencias a abordar problemas que tienen que ver con situaciones que simplemente lo que hacen es normalizar la violencia», ha dicho Moisa.
Un articulo del diario La Prensa Grafica (LPG), señala que en el último año, la violencia sexual (violaciones, acoso sexual, tocamientos indebidos, entre otros) tuvo un incremento de hasta un 13 por ciento con respecto al periodo anterior. Según cifras de la Fiscalía, los casos iniciados entre junio de 2022 y mayo de 2023 por violencia sexual fueron 7,939; es decir, 916 casos más.
Asimismo la violencia psicológica subió un 9.8%. En el último año, las autoridades fiscales reportaron 6,744 casos de este tipo de abusos contra los 6,144 registrados en el periodo anterior. Silvia Juárez, abogada y coordinadora del Programa hacia una Vida Libre de Violencia para Las Mujeres dijo que ni el régimen de excepción parece haber detenido la violencia contra las mujeres, a pesar que las cifras reveladas por la Fiscalía.
La organización Cristosal denunció el surgimiento de un nuevo victimario en el país en los últimos 16 meses, y muchas féminas tienen que convivir con él.
Rina Montti, directora de investigación en derechos humanos de Cristosal, señaló a policías y soldados que abusan de familiares de personas que fueron detenidas durante el régimen de excepción.
“Hay miedo de denunciar estos hechos. Normalmente tienen miedo que lleguen otros policías y además lamentablemente este tipo de delitos usualmente son parte de las cifras negra, porque son delitos que son parte de la cultura del silencio”, agregó. Mientras LPG indicó que tanto Moisa como Montti lamentan que en los últimos años se hayan eliminado o reducido programas destinados a garantizar los derechos de las mujeres y señalan que actualmente es «insuficiente la atención y protección».
Montti también estimó que el aumento de la violencia sexual podría estar vinculado también a la crisis en los hogares por el impacto que tiene el malestar económico en las vidas familiares.
“Bukele implementó la política del silencio, decir que al negar o no hablar de nosotras niegan nuestra existencia y todo lo que lo que ocurre contra los cuerpos de las niñas y de las mujeres”, dijo la experta.
En El Salvador las mujeres son mayoría frente a los hombres y acuden en mayor proporción a las urnas para elegir a las autoridades del país. PL
(Fotos: Pixabay)
.jpg)
