Derechos Humanos, Globo, Luchas, Movimiento, Política, Reino Unido, Trabajadores

Detenidos II – Becky: “No podemos aceptar todo lo que se nos hace”

Un servicio de salud deficiente, detenidas abusadas por los guardias y un sistema que “rompe tu corazón” son algunas de las cosas que esta mujer camerunesa vivió mientras estuvo detenida en el Reino Unido. “Es gente que ha sido torturada, que ha sido violada en masa en sus países”, explica. Memorias de The Prisma. Enero 2018.

 

noche dark pixabayMarcos Ortiz F.

 

“El personal en los centros de salud no está preparado. Hubo una vez en la que una mujer enfrentó a las enfermeras y ellas le dijeron abiertamente que no estaban preparadas”.

Becky, mujer camerunesa de 37 años detenida dos veces en 2013 y 2014 en Yarl’s Wood por un periodo total de un año, tiene la peor impresión del sistema de salud al interior de los centros de detención de inmigrantes. Argumenta, por ejemplo, con el efecto que algunos medicamentos genéricos tienen sobre algunas de las detenidas.

No hay alimentos 9 Pixabay

“Había una mujer que empezó a sangrar de manera continua, colapsó y los oficiales la ignoraron, dijeron que estaba fingiendo que tenía problemas para caminar hacia el centro de salud. A mitad de camino cayó sobre una silla y colapsó. Fuimos a ayudarla, pero no respondía a nadie. Le avisamos a los oficiales lo que sucedía. Dijimos que no podíamos dejar que alguien más muriera”.

“Llamamos a la ambulancia, la gente de la ambulancia condujo y llegó, pero los guardias los enviaron de regreso. Les dijeron que la situación estaba bajo control, pero a nadie le importó”.

“Descubrieron que alguien había llamado a la ambulancia y querían saber quién lo había hecho. Una vez que alzas la voz, una vez que eres activo, tienen un método para silenciarte. O bien te llevan a la prisión (Kingfisher) en el centro de detención o traen a guardias para advertirte. Así que al día siguiente asignaron a dos guardias para que vinieran a nuestros cuartos y nos advirtieron.

Dijeron que llamar a la ambulancia era una ofensa criminal”.

“Así es como enfrentas una atmósfera en la que el acoso está permitido, donde hay racismo, donde hay sexismo. Había oficiales que se aprovechaban de las mujeres que estaban desesperadas”.

“En 2013 había sobre todo guardias hombres. Entraban en los cuartos de las mujeres sin siquiera golpear y muchas de esas mujeres se estaban vistiendo o estaban dándose un baño o una ducha. Estos guardias estaban tan excitados al describir cómo eran sus pechos”.

victoria parcial pixabay“Durante ese tiempo muchas mujeres fueron abusadas sexualmente, porque también había en el centro de detención rincones en los que no había cámaras. Así que los oficiales aprovechaban para llevar a estar mujeres a esos rincones para abusar de ellas. Hubo casos de oficiales que se acercaban a conversar con nosotras, sus novias eran mujeres detenidas. Durante ese periodo un oficial fue despedido porque estaba tratando de delatar a aquellos que trataban de abusar de las mujeres”.

“Descubres que la mitad de las mujeres u hombres detenidos son gente que escapan de guerras en sus países, gente que ha sido torturada, que ha sido violada en masa en sus países, que han enfrentado la cárcel o el rechazo de sus sociedades, y sienten que finalmente están a salvo en el Reino Unido”.

¿Trabajaste mientras estabas detenida?

En el centro de detención emplean a muchas mujeres para trabajar en la cocina y otras áreas. Se les paga £1 por hora. Eso significa que no están dando empleo a gente de afuera, así que las detenidas están haciendo su trabajo.

Yo solía hacer algo llamado bienvenida. Mi objetivo no era el dinero, sino que tener la oportunidad de levantar la voz en las reuniones. Nos llamaban a todos a la mesa para hablar con el jefe de Serco y con algunos de los líderes. Así que pensé que esa era una oportunidad para contar lo que estaba sucediendo.

La primera vez pasaste cinco meses adentro. ¿Cómo conseguiste salir?

Logré salir cuando conseguí apelar a mi caso. Cada vez que trataba de poner algo ellos volvían con un boleto de avión. Algunas veces usé al MP para detener los vuelos, otras veces porque tenía un caso de violencia doméstica en el que denuncié violación, por lo que la policía debía investigar y yo tenía tiempo para detener los vuelos insistiendo que tenía una entrevista con la policía por el caso de violación. Pero cuando logré poner el caso fue entonces que solicité la postulación a la fianza y logré que me soltaran.

¿Cuánto tiempo estuviste liBelleza, la obsesion mujer asiatica pixa 8bre?

Entre 2 y 3 meses. Luego fui detenida de nuevo. Debí empezar a firmar.

La segunda vez que fui a firmar me dijeron en el centro policial que el Home Office les había solicitado que me detuvieran. Fue shockeante.

Me llevaron nuevamente a Yarl’s Wood. Pero primero pasé casi tres días en una celda policial.

¿Conociste a gente que había estado detenida por largos periodos?

Sí. Y creo que eso fue lo que me rompió el corazón. Estaba realmente triste porque vi a muchas mujeres que había conocido antes por primera vez, no habían salido. Conocí a una mujer que estaba ahí por más de dos años.

Fue tan difícil la segunda vez porque ya sabía cuán perverso, malvado y cruel era el sistema. Su intención es no permitir que la gente permanezca en el Reino Unido, intencionalmente sacarlos lo más rápidamente posible.

noche pixabay¿Viste a familias con hijos en Yarl’s Wood?

No, no vi niños, pero vi una familia con gente joven, veinteañeros. Una cosa que me shockeó fue una mujer que estaba embarazada. Me preocupaba ver a embarazadas adentro.

Creo que esas son las cosas que te hacen sentir que su política consiste solo en asegurarse de que las familias se dividan. Había mujeres que fueron deportadas mientras sus hijos seguían en el Reino Unido.

Deliberadamente llevaban a estas mujeres a centros de detención, llevaban a sus hijos a centros de cuidado y luego deportaban a las madres. Había casos en los que deportaban al marido y permitían que la mujer se quedara en el Reino Unido. En Yarl’s Wood eran en su mayoría africanas, asiáticas y mujeres del Caribe.

¿Se puede llevar una vida normal luego de ser soltada definitivamente?

Depende de lo que llames una vida normal. Es tan difícil cuando te sueltan, porque todos esperan que estés feliz y retomes tu vida normal, pero ahí es cuando esto empeora.

La mitad de las veces es como si estuvieras fingiendo ponerte al día con muchas cosas, pero no puedes porque cuando me soltaron es cuando me di cuenta de que estaba realmente afectada mentalmente.

Los 10 mil pasos FEATURED Fotos Pixabay 2No podía realmente seguir el mismo ritmo de los demás. Debía permanecer en silencio, porque no quiero que la gente se dé cuenta de cómo me comporto, cómo veo las cosas. Donde vayas no puedes hablar porque la gente te va a mirar en menos y nadie te va a respetar.

¿Has conocido a otras mujeres detenidas que sientan algo parecido?

Sí. Creo que hay depresión. Las mujeres a menudo están peor y están sufriendo. Quieres expresar tus emociones, pero a veces te atrapan los recuerdos del centro de detención, sueños de ellos viniendo a esposarte. Mi idea de alguien esposado era alguien que había robado algo, un criminal. Ser detenida y esposada en el aeropuerto después de haber trabajado y pagado impuestos y al día siguiente ser tratada como un paria realmente mató mi espíritu.

Me ha hecho darme cuenta de que realmente no aprecian a los inmigrantes. Eso te destruye, porque realmente no quieres cambiar como ser humano, pero el sistema rompe tu corazón. Te hace tender hacia algo que no quieres. De nuevo, gracias a Dios existe All African Women Group (AAWG) en Crossroads, un grupo de buscadoras de asilo, refugiadas y mujeres con problemas migratorios que viven en el Reino Unido, que se reúnen cada dos semanas y trabajan colectivamente en sus casos utilizando la Guía de auto-ayuda. También hacen campañas por sus derechos.

¿Estás orgullosa de ti misma y de lo que has logrado?

vela fuego noiche luz pixabay

Sí, por supuesto. Lo estoy. Estoy orgullosa de mí porque desearía que todo el mundo pudiera luchar así. He logrado conectarme con muchas mujeres que también se han esforzado para luchar como yo en el AAWG con la ayuda de WAR.

He conocido a mujeres que no pueden pelear, a quienes les hemos dicho vamos, levántate. Es ahí cuando ves la energía y ves que aún hay esperanza. No podemos aceptar todo lo que se nos hace. No podemos aceptar ser cucarachas, como nos llaman ellos. Porque hemos contribuido a esta economía, hemos traído nuestras habilidades aquí, hemos hecho cosas.

Lo que me entusiasma es que una vez que un caso se gana esto ayuda a los demás casos.

(Fotos: Pixabay)

Share it / Compartir:

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*