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Parar las estrategias de racismo y xenofobia

En la Gran Bretaña del Brexit, Rishi Sunak sigue sintiendo la necesidad de seguir adelante con su extraño plan para abordar el asilo y la inmigración a través de su emblemático programa «Stop the boats». Y ello pese a que Sunak admitió en 2022 que pensaba que el plan de Ruanda sería ineficaz.

 

 

Peter Cook*

 

Sunak sigue porque sus partidarios del Brexit duro necesitan apelar a los racistas geriátricos que creen que el declive de la fortuna de Gran Bretaña se debe a que la gente huye de las zonas de guerra.

El proyecto Stop the Boats es ilegal, inmoral, indecente y poco práctico. Y una forma de desbaratar a Rishi Sunak es a través de las urnas en las Elecciones Generales del Reino Unido mediante el voto táctico y Swap my Vote para maximizar su impacto en un sistema de votación injusto.

Legalidad

El derecho internacional exige que a las personas que solicitan asilo se les ofrezca un refugio seguro. Sunak ya ha indicado que piensa incumplir el derecho internacional para llevar a cabo su plan de inmigración. El plan de Ruanda ya se ha sometido a los tribunales británicos en dos ocasiones y se ha declarado ilegal por considerar que no era seguro.

En lugar de respetar el Estado de Derecho, Sunak aprobó una nueva ley declarando que Ruanda era un lugar seguro para los refugiados. Esto es un poco como decir que quieres que tu gato sea un perro, cuando evidentemente es un gato. Así que se aprueba una ley que dice que los gatos son perros. Pero en realidad siguen siendo gatos. ¿Alguien se deja engañar por esta distorsión de la realidad al estilo de 1984?

Moralidad y decencia

Gran Bretaña solía ser un lugar en el que cabía esperar que se aplicaran normas estrictas en cuestiones de dignidad humana. El plan Ruanda y la iniciativa Stop the Boats exigen que las personas sean encarceladas en barcos prisión o enviadas a Ruanda.

Una vez en el país, les resultaría casi imposible interponer un recurso. Dado que la inmensa mayoría de los migrantes son legales, se trata de un acto inmoral que desafía todo sentido del juego limpio y la decencia.

Impracticabilidad

Recientemente se reveló que todo el alboroto sobre Ruanda no es más que eso. Ruanda ha sugerido una capacidad de 500 solicitantes de asilo, pese a que el número  de casos pendientes es actualmente de 99 000. Esto significaría que se necesitarían 198 años para evacuar la cifra total. Esto significaría que se necesitarían 198 años para erradicar el retraso. Y además enviar a Ruanda a cada solicitante de asilo costará 3 millones de libras esterlinas.

Si ese es el costo, ¿por qué no dar a cada persona que Rishi no quiera 3 millones de libras, con la condición de que se trasladen a otro país? Estarían literalmente tranquilos de por vida. No se me ocurre ningún país que no acepte a un multimillonario.

Todos somos inmigrantes. Foto de Alisdare Hickson Flickr. Creative Commons License.

Este burdo despilfarro del dinero de los contribuyentes debe contrastarse con otras verdades incómodas: la gran mayoría de los inmigrantes tienen derecho legal a estar en Gran Bretaña.

Tenemos una enorme escasez de mano de obra cualificada y necesidades de empleo en la agricultura, la hostelería, la sanidad, la asistencia social y otros sectores, incluida la alta tecnología. Muchas de las personas desplazadas están altamente cualificadas; y no hay necesidad de encerrarlas  en hoteles y barcos prisión.

El pequeñísimo porcentaje de inmigrantes ilegales que representan un peligro real para la sociedad deberían, por supuesto, recibir el trato adecuado y ser devueltos a su país de origen o encarcelados.

Las políticas de Ruanda y Stop the Boats son «soluciones que buscan un problema».

Sunak mintió recientemente sobre las reducciones de inmigrantes que llegarían a Gran Bretaña en 2023. Presumiblemente siente que tiene que hacerlo para rezar en el altar del Brexit por sus facciones de derechas en el partido Tory / UKIP / Brexit y especialmente las voces de Suella Braverman, Kemi Badenoch, Nigel Farage, Richard Tice, Lee Anderson, Steve Baker, Esther McVey, Jacob Rees-Mogg, Priti Patel et al., que han envenenado el partido Tory con estrategias de racismo y xenofobia al estilo de la Alemania nazi de 1930.

Sonámbulos hacia el fascismo

Esta película contiene imágenes desafiantes sobre el deslizamiento de la Gran Bretaña del Brexit hacia un estado fascista. No nos disculpamos por ello. El arte y la sátira deben reflejar la realidad. ¿Cuántos más deben morir antes de que la decencia sea restaurada en nuestra política?

La película de ciencia ficción de los años 50 «El pueblo de los malditos» proporcionó una forma de triste inspiración para esta pieza, en lo que se refiere a la idea de que el partido conservador se ve ahora a sí mismo como una raza superior que debe sobrevivir a toda costa.

La historia se repite demasiado a menudo si se lo permitimos… no lo hagamos. Por ello, quienes estén de acuerdo en que Stop the Boats es ilegal, inmoral, indecente y poco práctico, deben decir ‘no’ a Rishi Sunak votando en las Elecciones Generales.

*Peter Cook lidera Reboot Britain / Rage against the Brexit Machine. Autor de tres libros sobre el Brexit, seis álbumes de canciones de protesta, himnos inspiradores y 400 películas. Organiza eventos colaborativos online y activismo de base «para educar a la gente sobre el fracaso del Brexit y que podemos y debemos reincorporarnos a la UE como prioridad».

(Traducido por Camila Marquez) – Fotos: Pixabay.

 

 

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