La situación de emergencia sanitaria mundial coloca a las mujeres, niñas y adolescentes vulnerables en una encrucijada entre la preservación de su salud en aislamiento y el peligro que representa convivir con un agresor en un escenario difícil.
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ailyn Ruano Martínez
En fechas recientes la Organización de las Naciones Unidas para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres (ONU Mujeres) alertó sobre los riesgos a los que se exponen las féminas debido al aumento de las tensiones en el hogar.
“Las personas sobrevivientes de violencia pueden enfrentar obstáculos adicionales para huir de situaciones adversas o para acceder a órdenes de protección y servicios esenciales que pueden salvar vidas, debido a factores como las restricciones de la circulación o la cuarentena”, subrayó ONU Mujeres, citada por medios de prensa.
La ejecución de mecanismos especiales de protección a mujeres en riesgo por violencia, agravada por la cuarentena, se impone en un país como Venezuela, donde prevalecen elementos de carácter cultural, a pesar de los esfuerzos gubernamentales por emancipar el papel de las féminas en los diferentes ámbitos de la sociedad.
Lo cierto es que los riesgos de sufrir episodios de violencia de género para las mujeres víctimas de este flagelo en el mundo aumentan con las medidas de aislamiento social implementadas para la contención de la pandemia de Covid-19.
El confinamiento constituye la forma más eficaz de reducir el número de contagios a causa del coronavirus SARS-CoV-2 -coinciden las autoridades sanitarias-, aunque en este escenario, varios expertos en temas feministas advierten sobre los peligros latentes para aquellas a las que su propio hogar no representa un lugar seguro.
La cuarentena social y colectiva decretada en Venezuela para cortar las cadenas de transmisión de la enfermedad, unida a las consecuencias de las medidas coercitivas impuestas por Estados Unidos, pone más tensión en la economía doméstica de algunos sectores, lo que hace encender las alarmas para la protección de potenciales víctimas de abuso.
Organizaciones feministas refuerzan aquí los mensajes de apoyo a las agredidas ante el aumento de casos expuestos a la violencia de género en el mundo, donde diversos países reportan el fenómeno como una de las consecuencias del confinamiento para prevenir el Covid-19.
El Instituto Nacional de la Mujer difunde por varios canales digitales, redes sociales y de televisión consejos como el establecimiento de rutinas diarias de distribución de tareas en el hogar y la denuncia de posibles maltratos verbales, físicos, acosos o abusos sexuales durante el encierro domiciliario.
También proponen a las féminas ir en compañía de una vecina u otra persona de confianza para adquirir los alimentos, medicinas o artículos de primera necesidad; evitar salir a lugares solitarios y mantenerse comunicadas con sus personas de confianza.
Los colectivos @Entintavioleta y @Entrompefalopio en la red social Twitter, promotores de discursos culturales en contra de manifestaciones de opresión de este sector, divulgan imágenes elaboradas por el Ministerio de la Mujer y la Igualdad de Género para brindar ayuda a las víctimas mediante una llamada telefónica al servicio de urgencias 911.
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través de las etiquetas #NoestasSola, #CuarentenaNoEsSilencio y #CuarentenaFeminista, estas organizaciones afirman que “hay miles de nosotras compartiendo espacios con sus agresores”, mientras advierten “si estás en riesgo por causa de la violencia en tu hogar puedes buscar ayuda. ¡No estás sola!”.
Las razones para esta alerta en tiempos de Covid19 la dan la los estereotipos machistas, los roles tradicionales de género y los comportamientos agresivos hacia las mujeres.
La Fundación para la Prevención de la violencia doméstica hacia la mujer (Fundamujer), dicen que no hay estadísticas poblacionales confiables, pues se trata de uno de los delitos sociales que menos se denuncian. (PL)
(Fotos: Pixabay)
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